En los últimos años esta práctica se ha convertido en un recurso más a la hora de encontrar una vivienda. La transformación de un local comercial en hogar responde no solo a la decisión práctica de adaptar un espacio disponible, sino también a la creación de un espacio acogedor pero a la vez, original. En Gesalra ofrecemos todos los servicios necesarios para convertir un local comercial vacío en una vivienda ideal, no solo en materia de reformas, sino también le acompañamos con los trámites y permisos necesarios para disponer de una vivienda totalmente en regla.
En primer lugar, para poder convertir un local comercial en vivienda es necesario encargar un informe urbanístico del local en cuestión, un trámite necesario para poder presentar la solicitud de cambio de uso del espacio. La futura vivienda tiene que cumplir con varios requisitos, como por ejemplo, estar acorde con las normativas de Accesibilidad, Habitabilidad, Prevención de Incendios, Placas solares y Telecomunicaciones.
Además de la licencia de cambio de uso, será necesaria una licencia de obras para poder realizar las reformas pertinentes que convertirán nuestro local comercial en una vivienda acogedora. En Gesalra nos hacemos cargo de tramitar todo lo necesario para garantizar que la vivienda resultante cumplirá con todos los requisitos para ser habitable.
En Gesalra disponemos también de recursos ideales para aprovechar al máximo el espacio de cada local y, de esta forma, convertirlo en una acogedora vivienda. Dependiendo de la forma y estructura del local original, se puede reconvertir en un loft a la última, con grandes espacios abiertos para la convivencia, aunque también se puede optar por otro tipo de distribución para aprovechar la forma original del local y convertirlo en un espacio totalmente casero.
La combinación de estilos puede ser la clave para convertir un local comercial en desuso en un magnífico espacio acogedor y moderno. Combinar, por ejemplo, la estética industrial que puede dar la obra vista en alguna de las paredes o los muebles metálicos, que actualmente se llevan mucho en espacios como las cocinas abiertas, con un estilo más cosy, con papel pintado y suelo de madera, y muebles que adoptan las técnicas handmade como el patchwork o el decapado, pueden convertir un frío local en un apartamento chic y totalmente acogedor.